En Mapuche de punta negra encontrarás la tranquilidad y calma que estás buscando para tu estadía. Toda una casa de uso exclusivo para ti. Aquí no hay alarmas, notificaciones, ni smart tv. Te proponemos desconectarte del wifi, respirar el aire natural sin condiciones. Ser un pez en el agua, brillar como haz de luz fuera de la fibra óptica. Ubicada a 200 m de la playa y a un tiempo inexistente del centro de Piriápolis, al cobijo del monte nativo y envuelto en la brisa marina se encuentra la belleza y la armonía de esta hermosa casa de madera, básica, simple y muy confortable. Aquí hay noches de fogón en el jardín, cielos repletos de estrellas, el sonido de las olas de una tarde de verano, un amanecer florido de dulce aroma a sal. Aquí te ofrecemos bucear en el aire fresco y en un profundo sueño ser gaviota, despertar, recordar ayer y verse desde arriba pescando a la encandilada. Aquí saetas de cupido viajan en cálidas siestas de deseos. Efervescentes noctilucas palpitan en las noches corazones, amanecen mariposas y los rayos del sol renuevan ilusiones. Abrazo de oso, te esperamos.

Espero que la pasen genial!!

Plaza con juegos para niños, eventos culturales, ferias artesanales.